“El salario que ustedes han defraudado a los
trabajadores
Que segaron sus campos está clamando contra
ustedes;
Sus gritos han llegado hasta el oído del
señor de los ejércitos.”
“Han vivido ustedes en este mundo entregados
al lujo y al placer,
Engordando como reses para el día de la
matanza.”
“Han condenado a los inocentes y los han
matado,
Porque no han podido defenderse.”
(De la carta del apóstol Santiago. Sant 5, 1-6)
El
tema de la reforma laboral, ha sido el más comentado en los medios de
comunicación y en los medios empresariales, los órganos de poder han
permanecido inmutables, preocupados sus
actuales ocupantes en la mudanza del
sexenio y en lo que será su futuro.
Ha
sido una vez más, la reforma de una ley que solo la conocen los creadores y
aquellos a quienes verdaderamente habrá de favorecer, en este caso a los
empresarios. Estos urgidos de nuevos mecanismos que les permitan acrecentar sus
ganancias, porque al fin y al cabo no les interesa la situación particular de
sus trabajadores.
¿Por
qué no ventilar ante la clase
trabajadora, ante el pueblo, ante la nación entera, cuales serian los cambios
que habrían de hacerse a la ley federal del trabajo, antes de su discusión y
aprobación entre los legisladores?, que en teoría son sus representantes, pero
que de sobra sabemos, atienden mas a sus intereses de grupos y a los intereses
políticos que les permitan mejores privilegios personales.
La
discusión se ha centrado en el tema de los sindicatos, que si la transparencia
del manejo de sus recursos económicos, que si
su manejo electivo y la duración de sus gestiones, que si la democracia
sindical, pero nadie, nadie, se ha percatado o se han hecho los omisos en
reflexionar, discutir y defender lo que sí es atentatorio al futuro de la clase
trabajadora, la legalización de los outsourcing, empresas dedicadas a la
subcontratación de personal; a la legalización del trabajo a prueba, y a la
limitación de los pagos de salarios caídos en un juicio laboral, como si el trabajador
fuere el culpable de la eternidad que dura un juicio laboral en las juntas de conciliación y arbitraje.
La
cortina de humo que se ha levantado con los sindicatos, ha sido el tema toral
de la discusión, entre los legisladores del PAN, PRI, y los partidos de
izquierda, que se desgarran las vestiduras y organizan espectáculos de circo,
para conservar entre sus militantes y simpatizantes sus líneas de apoyo hacia
las clases trabajadoras y marginales del país, su clientela.
El
día 30 de septiembre por parte de los
diputados federales de la comisión se votó y aprobó la des reforma laboral, el tema de los sindicatos se dejó para mejor
ocasión; ahora el balón esta en el campo
de los senadores, que seguramente, los del PAN, PRI, VERDE ECOLOGISTA, PANAL,
habrán de confirmarla y los partidos de izquierda de nueva cuenta habrán de
lanzar sus voces y gritos en contra de una reforma laboral que no puede
llamarse así, porque para ello habría que hacer una Nueva ley laboral.
La
clase trabajadora del país una vez más ha recibido las cuchilladas de rigor; el
incremento de la productividad hay que lograrla para el empresario a costillas
del trabajador, para que sus inversiones
no padezcan y nos hagan el “favor” de crear mayores oportunidades de empleo,
hay que seguir alentándoles con exenciones de impuestos, con fomentos del
erario público, para incrementar su producción, con la aceptación de fundaciones
que ayudan a los necesitados, implementando campañas de redondeo, de donaciones
de a peso o cinco pesos, de compras de pulseritas o relojitos de pacotilla, que
lucen actores y actricitas de la farándula, y que en realidad son negocios
montados por la grandes empresas para seguir deduciendo impuestos y ¿a quién le
rinden cuentas?
Hoy
me entero de la declaración a los medios del diputado panista, para variar empresario, decir, que los
diputados del PRI, no tocaron el tema de los sindicatos, porque están amafiados
con ellos, cubriéndoles como siempre; con ello se comprueba la cortina de humo
y el distractor de panistas que representan a la clase empresarial, este
diputado empresario, que seguramente tiene en sus empresas trabajadores con limitaciones
salariales y regateándoles sus prestaciones de ley, y que jamás habrá de permitir la creación de
un sindicato en su empresa, para poner
en práctica lo que tanto reclama, porque predicar con el ejemplo no creo que
sea su caso.
El
futuro laboral en México, se avizora no muy halagador para las nuevas
generaciones, a pesar de las grandes campañas de publicidad del presidente Calderón,
hay desempleo, y con esta des reforma,
el futuro se agrava, sino al tiempo. La nueva administración del gobierno federal,
deberá buscar y encontrar mejores mecanismos legales que equilibren los
factores del capital y el trabajo, existe una gran oportunidad, México requiere
ya de un gran líder, de un verdadero estadista esperamos encontrarlo en Enrique
Peña Nieto.
José
Gpe. Andrade Méndez.
2
de octubre 2012