Hoy
es 31 de diciembre ultimo día del año 2014, la noche de este día, la noche
vieja y todo ser humano siente y vibra en sus adentros el termino y el
principio de un tiempo, de una etapa de vida, de un tiempo que se va, que se
despide con la nostalgia que a todos nos arropa, para sentir y vivir la renovación
de la vida y con ello de la esperanza que se ciñe en todo destino de hombre o
mujer.
La
noche vieja para muchos representa la anhelada espera de un nuevo año, cuyas
primeras horas muchos las vivirán plenos de alegría, acompañados de familiares,
amigos y sentimientos fraternos.
Para
otros, la tristeza de no contar con la alegría de estar junto a familiares,
amigos, conocidos y vestir el sentimiento de la tristeza y de la añoranza, de
los amores y afectos perdidos y de las desventuras que la vida da y presta a la
humanidad.
Año
nuevo, renovados propósitos, esperanzas redivivas, sentimientos encontrados,
distancias sociales equidistantes, y el ser humano continúa su perenne camino,
cruzando las barreras de la incomprensión, de la intolerancia y la carencia del
respeto a la biodiversidad.
El
año nuevo 2015, esperanzador para algunos, descorazonador para otros, pleno de alegrías
para aquellos que la fortuna de su clase social le permite no tener conciencia
de una realidad social que enferma de pobreza material, fortalece su riqueza
humana, a diferencia de aquella que se solaza con la abundancia y la incomprensión
hacia sus semejantes.
Al
sonar las doce campanadas de la noche vieja, los deseos de muchos se
encontraran en el infinito y en los mantos de la espiritualidad. Y esos deseos
serán de salud, de riqueza material, de bienestar, y otros de pedir al supremo
creador por sus seres queridos, que han dejado la morada terrenal para ocupar
otros planos insondables.
Y
la esperanza se presentará como brote que da la tierra, manifestación perenne
de la vida. Tiñendo de color esperanza los campos de la humanidad que habrán de
recoger la cosecha de la esperanza, de la
paz, de la fraternidad y la comprensión entre los seres que conforman
las sociedades de este planeta.
Feliz
año 2015, estimados y apreciados lectores.